Monday 20 June 2022

C3PO y yo



 Queridos y queridas, es que el título me cuesta creérmelo hasta a mí. Pero por Han Solo, que es cierto. 

Hace mucho tiempo, en una galaxia lejana, muy lejana...

Corría la primavera de 2014. Estaba finiquitando un curro en los estudios Pinewood de Londres. Que queda muy glamuroso pero lo que hacía realmente era contar todas las radios del rodaje, con sus pinganillos, sus clips y poniéndolas en sus respectivas cajas. Un auténtico tetris que me tocaba hacer sola en un despacho de mala muerte al son de kiss fm. Un coñazo, vamos. Una vez encajadas todas las piezas, las tenía que llevar una a una en un carrito de golf a la oficina principal de la productora. En cada viaje me imaginaba que era una directora famosa camino a mi propio rodaje y no como la mera auxiliar de dirección que era.

Perdida en mis ensoñaciones de Antoñita la fantástica, casi me cargo a Karl, un supervisor de producción con el que curré un par de años antes. Después de pedirle perdón encarecidamente por casi llevármelo para el otro barrio, nos ponemos a hablar, yo le digo que estoy terminando un proyecto y él comenzando otro. "You don't happen to be needing anyone?" ("No estarás buscando a alguien por casualidad?"), le pregunto mientras le hago ojitos manga. "Actually, I am" ("De hecho, sí"), me contesta sonriendo. "And what's the project, may I ask?" ("Y cuál es el proyecto?), vuelvo a preguntar curiosa. "Star Wars". (Esto no creo que haga falta que lo traduzca). Se me van levemente las pencas y me tengo que agarrar al carrito de golf para no caer con las paletas al cemento. "Are you kidding me?" ("Estás de broma?'"), le grito más que le digo. Él se ríe. Me explica que "sólo" es la segunda unidad, o sea la de los especialistas y las explosiones. A mí como si me pones a rodar detalles de cascos. Me la trae al pairo. STAR WARS!!!!!!! Le doy un abrazo que le estrujo la panza que eso es lo más anti-británico que hay en este mundo. Él acepta mi gesto estoicamente. El pobre, qué va a hacer.

Le tengo que mandar el currículum, no podemos cantar victoria aún. Los que me tienen que dar el visto bueno son el primer y segundo ayudantes de dirección. Paso dos días de auténtico infarto al corazón con el móvil pegado a la nariz con loctite. Lo que veía tan cantado, cada vez lo veo más lejos. Mi amigo Juan no deja de animarme pero yo cada vez lo veo más chungo. 

Al segundo día, de camino al cine, me llama Andy, el segundo ayudante de dirección. Tengo suerte, el primero es un flipado de España y, bueno, tengo buenas referencias y un buen currículum...yeah. Empiezo al siguiente lunes. Me hago caca. Pero literalmente amig@s, porque vuelo hacia al baño en cuanto cuelgo.

Llego a los estudios Pinewood de nuevo pero con otro aire, otra actitud. ¡Voy a estar en motherfucking "Star Wars"! 

Comienzo a buscar las oficinas de producción para que me den mi acreditación, pero me siento como Jennifer Connelly en "Dentro del Laberinto" dando más vueltas que una peonza. No encuentro los despachos ni para atrás. De pronto veo varios coches negros estupendos todos juntos aparcados y eso siempre es señal de gente importante. Pillo a uno de los conductores por banda y le pregunto inocentemente, "Excuse me, the Star Wars offices?" ("Perdone, las oficinas de Star Wars?"). De pronto, parece que le han dado una patada en los mismísimos cataplines y me contesta susurrando como si estuviéramos en una película de Harry Potter y hubiese mencionado al innombrable de Voldermort, "first of all, we don't say Star Wars, we say AVCO. And the offices are through that door" ("primero de todo, no decimos Star Wars, decimos AVCO. Y las oficinas están a través de esa puerta"). Yo me quedo mortimer ante tanto secretismo, claro, pero me dirijo en la dirección indicada sin mediar palabra. Una vez atravesada la entrada totalmente insulsa de la oficina, me asalta una explosión de colores. Era como entrar en la cantina de Mos Eisley del episodio IV. Lo primero que me dio la bienvenida fue un póster gigantesco de "LucasFilmLtd" que casi me desmayo allí mismo en la recepción. Dos chicos pasan con mini robots como quien pasea por el Retiro. Todo está repleto de pósters de la saga, algunos firmados por los actores. En una vitrina hay unos cuantos oscars, como quien no quiere la cosa. Una mujer cruza el hall con un raíl lleno de trajes del vestuario de la película. El ajetreo es continuo. Mi cara de alelada, tiene que ser todo un poema. La chica de recepción creo me ha dicho "Hello?" un par de veces. Por fin reacciono y le explico que es mi primer día allí. Creo que ella ya lo intuía. Me hace rellenar más papeleo que en una declaración de hacienda, me hace una foto en la que recuerdo vivamente tener cara de estar de tripi y me explica cómo llegar a los trailers de dirección. De nuevo me hago caca. Esto, creo, va a ser un dato recurrente en este trabajo.

Salgo de las oficinas que me tiemblan las canillas. Ilusa de mí, eso solo era el principio. 

Tuerzo a la izquierda como me ha indicado la recepcionista muy amablemente y allí, en la distancia, tres siluetas se acercan hacia mí. Al principio no las distingo bien. Están muy lejos, pero hay algo en ellas que me resulta familiar. Hace buen día, no hay ni una nube, y el sol se refleja en las tres figuras y de pronto me deslumbran. Debo parecer un poco gilipollas porque voy que no veo un pepino. Por fin, el sol se aleja de ellas y casi la palmo allí mismo, con mi acreditación colgada al cuello y todo. Frente a mí, tres stormtroopers como tres soles. Tengo que contenerme para no salir corriendo hacia ellos como una fan más. El estómago me baila la conga. 

Llego al trailer de dirección y las presentaciones son supersónicas. No hay tiempo. Tenemos que ir a la primera unidad. Están rodando y tenemos que ver qué tendremos que hacer nosotros. Voy detrás de mis jefes que parezco un chinche.

Nos presentamos en el set y es entonces cuando mi mente implosiona. Una nave llena de stormtroopers a mi derecha se tambalea. Entre ellos está John Boyega. Hay explosiones. JJ Abrams, y Kathleen Kennedy están en los monitores observando la secuencia. Tengo que cerrar los puños y apretar las uñas contra la piel para creerme lo que estoy viendo. Soy una fan acérrima de "Star Wars" y esto va más allá de mis expectativas. El primer ayudante de dirección me dice que aquí estaremos rodando tres días. Me suenan las tripas de los nervios, y a pesar del ruido ensordecedor de la nave, mi jefe lo oye. Yo muero de la vergüenza, le miro, sonrío y le digo en español "el café". ¿Se puede ser más lerda, señor? ¿Qué me queda, tirarme un cuesco en su cara?

Efectivamente me paso tres días rodando en ese set gigantesco con explosiones, stormtroopers a gogó, pantallas verdes gigantes y naves voladoras. Nada puede superar esto.

O sí...

Mis jefes no dejan de hablar de la secuencia de la noria. Yo la verdad es que estoy tan flipando en colores neones con todo que no me da tiempo a procesar. Hasta que llega el día de la noria. Y es cuando mi cerebro no solo implosiona, sino que explosiona, implosiona y vuelve a explosionar. Aquel día alguien me tendría que haber dado un lexatin porque casi muero de los nervios.

Me explico.

Llego como cada mañana con una señora bailando por bulerías en mi estómago, pero yo con cara de póker en plan esto lo hago a menudo, sip. Me dicen que nos vamos al set de la noria. Ok. Venga. Llegamos y la Paulis pierde por un momento la respiración porque tiene en frente el puto Halcón Milenario. 

Todo absolutamente todo en la película tiene su palabra secreta. "Star Wars" es AVCO, por qué, para que no llegue a la prensa, o que las compañías no cobren más por ser la peli que es. ¿Qué es AVCO?, preguntaréis, pues son los cines en los cuales JJ Abrams vio "Star Wars" por primera vez, de ahí la palabra.

Por otro lado en las órdenes de rodaje no se ponían ni los nombres de los actores ni los sets donde se iba rodar por si, de nuevo, se filtraban a la prensa. Así que, por su forma, el Halcón Milenario era la noria. 

Voilá.

Y ahí estaba una servidora, dentro del set de sus sueños. En sus entrañas. La señora que baila bulerías en mi estómago parece que está usando mi bazo como tablao flamenco. Mientras, el segundo ayudante de dirección me comenta, como si nada que va a venir un actor a hacerse una prueba de cámara en el set, que busque su silla y tenga preparado agua y otros enseres. Digo que por supuesto. Que quién es. Él, natural como la vida misma, te dice que Anthony Daniels (C3PO) y yo me quedo congelada. Pero tal cual. Tenéis que entender que estoy en la segunda unidad, nosotros casi no lidiamos con actores. Y no sólo eso, es uno de mis primeros trabajos en el cine y soy una friki de la saga. ¿Es o no es para susto o muerte?

Llega Anthony y si es más británico caga biscotes de mantequilla, lo juro. Me presento. "Oh hi, Paula, nice to meet you". Es que me meo yo sola, es C3PO tal cual. Me pide, cómo no, un earl grey con limón. Comienzan a vestirle en una carpa que hay al lado del set. Y cuando sale es tengo que contenerme para no chillar un "¡ole hijo!". Debe ser consecuencia de la señora que tengo dentro y sus bulerías...

Soy consciente de que para algun@s es un hombre vestido de hojalata. Pero para otr@ es historia del cine, pura y dura. Recuerdos de niñez. Un sofá tapizado con violetas, un vhs, unos caramelos, y dos horas llenas de magia y aventuras.

Ver la prueba de cámara fue una auténtica pasada. En teoría tenía cosas que hacer pero me las paso por la pepitilla y me quedo a ver el espectáculo porque sé no volveré a presenciar semejante experiencia en mi vida.

Como una premonición, días más tarde tuve que dejar el rodaje por una lesión en el pie. Incluso años más tarde una enfermera me recordaba cojeando por los sets de "Star Wars" como una posesa. Hubiese hecho lo imposible por seguir allí, hasta que no pude más. 

Tuve la oportunidad de rodar muchas escenas del principio de la peli y eso me enorgullece una barbaridad aunque mi nombre no esté en los créditos finales esta vez. Todo quedó en mi retina y, ahora en la vuestra.

Y esa, queridos y queridas, es mi historia de C3PO y yo.



2 comments:

Cabrónidas said...

Joder, una gran historia.

la tía pau said...

Gracias!